domingo, 9 de marzo de 2014

La Pastilla Roja

¿Que hay después de una iniciación? ¿ me volveré más mágico? ¿recibiré poderes increíbles?
Estas son preguntas que nos hacemos todos ante la expectativa de una iniciación mágica.
El cine una vez más ha hecho mucho daño, tristemente no recibiremos poderes de un día para otro o tras cumplir los dieciséis.
Mi iniciación sucedió hace una semana y si es cierto que estaba muy emocionado y me preparé a conciencia para ello sentí no más que una gran presión en el tercer ojo y último chakra. Para mi fue cerrar una etapa y comenzar otra, un camino sincero y de compromiso con los dioses y para con mi tradición. Durante este año (algunos días más) he desarrollado habilidades que tenía dormidas, ha despertado mi conciencia de que formo parte de un todo llamado creación, Diosa o Deidad Primordial y me he mojado verdaderamente en trabajar y practicar muchas cosas que había postergado. Aunque suene a fricada me siento como Neo cuando toma la pastilla roja en Matrix. Esto no es algo que se pueda explicar con palabras tienes que experimentarlo. Cierto es que todo esto no ha sucedido de un día para otro sino tras un largo proceso.

Mi mentora llama catarsis a estas iniciaciones y no le falta razón, supone una purificación, una gran limpieza energética, emocional y espiritual. Y por qué no, un premio y reconocimiento hacia el duro trabajo de un año y un día.
Un iniciación supone un cambio a nivel de conciencia principalmente, un compromiso de seguir luchando día a día y aunque en esta religión llamada Wicca suela haber tres grados (según cada tradición), el conocimiento no termina con este entrenamiento.

¿Y ahora que? Pues ahora nada y ahora todo. Ya no no soy el mismo Runa Fuego, he cambiado muy mucho pero ese cambio no se debe sólo a que he estoy viviendo un camino mágico sino que de alguna forma he deseado y provocado cambios en mi vida. El futuro como suelo decir se presenta incierto, pero lleno de maravillosas posibilidades. Quiero seguir estudiando en mi tradición y seguir aprendiendo y disfrutando. No quiero atragantarme con tanto conocimiento de golpe así que masticaré muy despacito. El camino continua y a saber donde me llevará.. lo que tengo muy claro es que ya nunca más seré el mismo.



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